Tenía hambre y frío y poca esperanza. Tal vez por eso mi cerebro desempolvó aquel estribillo y yo lo dije en voz alta:
Y aquello nos salvó de acabar discutiendo porque teníamos hambre, frío y, cada vez, menos ilusión.
Tú nunca habías escuchado la canción, sin embargo, hablarte del videoclip en el que la actriz doblaba las rodillas para que no se notara que era más alta que Naím, nos dio algo diferente en lo que pensar. Algo que no fuera que teníamos que andar porque no podíamos pagar el autobús.
Así empezó nuestra afición por ver vídeos viejos de OT1. Comiendo sopa de sobre, todos histriónicos con la frase por cabeza a la que habían tocado para cantar Mi música es tu voz. Tostando el pan de molde en la sartén, Manu Tenorio marcándose un “attention whore” con Nuria Fergó cuando le tocaba cantar a ella.